[Las calles son un sin fin de masas distribuyendo el aroma de las montañas

Cuántas veces no pasamos frente a un semáforo, frente a miles de automóviles, árboles, personas diariamente sin tomar un segundo para observar; para dejar de pensar en nosotros, en nuestros problemas y pensar en todo eso que gira alrededor moviéndose sin control buscando un poquito de atención..Esas calles viejas que miles pisan y escupen sin temor , esas que nunca se quejan resistiendo con dureza. Mira dos veces eso que ignoras.


Sonríe con ese poste chueco que se cruza por tu camino, baila al ritmo de los coches, guarda el humo en tu bolsillo y deja sobresalir ese brillo de fresquedad, regala una sonrisa a un desconocido, toma el camino más largo, respira lento, fotografía cada paso, espera, detente.